Que estamos en la era del Big Data ya es una realidad. Nuevas bases que están provocando un profundo cambio en la industria, promoviendo una adaptación tecnológica en distintos sectores empresariales y creando nuevos proyectos y productos.
Recopilar, manejar y analizar cantidades ingentes de datos supone un elemento disruptivo que nos ayuda a interpretar y entender mejor la información, permitiéndonos tomar mejores decisiones, obtener previsiones futuras y generar nuevos mercados.
Además de disponer de un gran volumen de datos almacenados durante años con información de todo tipo, tanto pública como privada, vivimos en la época en las que más datos se generan, con más diversidad y desde cualquier rincón del mundo.Pero no siempre aprovechamos la elementos que se nos brinda, repercutiendo negativamente en la exactitud de los resultados y en la toma de decisiones, un factor esencial a tener en cuenta es la localización.
Todo ocurre en algún lugar
Estamos rodeados de sensores por todos lados. Los entornos urbanos están repletos de detectores que pueden captar datos como la información climática, del tráfico, aparcamiento, humedad, luz, contaminación, de paso… y por supuesto la información que generamos con nuestros smartphones, haciendo de cada uno de nosotros un sensor que vincula toda nuestra actividad a un lugar exacto en el planeta. En todos los ámbitos, como por ejemplo comercial, demográfico, inmobiliario o económico, podemos obtener información ligada a una localización, y todas estas fuentes de información nos permiten relacionar datos de manera espacial obteniendo así nueva información relevante.
En torno al 80% de los datos ocurre en algún lugar y solo el 10% de esta información se tiene en cuenta en la toma de decisiones. Visualizar los datos sobre un mapa nos aporta una potente utilidad para realizar análisis y obtener conclusiones.
Así, los datos geolocalizados nos permiten hacer visible y sintetizar nueva información que sería imposible de otra manera, estableciendo relaciones por sus localizaciones, condiciones, tendencias, rutas y patrones en el espacio.
Los sistemas de información geográfica GIS están cambiando por completo la gestión de la información, pues la representación espacial es un valor para todas las áreas empresariales que permite manejar los datos de manera eficiente, descubrir y entender nuestro mundo con nueva información, y tomar decisiones de negocio más acertadas.
Infinitas aplicaciones
La visualización de datos espaciales supone un valor esencial para las empresas y brinda la posibilidad de aprovechar esos datos con una lista tan diversa de aplicaciones como de datos disponibles. Sectores tan diversos como el de seguros, finanzas, salud, medio ambiente o comunicación están descubriendo el potencial de la información geoespacial.
El análisis y representación geográfica de los datos se puede utilizar, por ejemplo, para recomendar a un emprendedor sobre el lugar más apropiado donde abrir su negocio en base a componentes como el poder adquisitivo, la densidad demográfica o el flujo de movimiento de personas en la zona. Poder establecer eficazmente planes de movilidad o comprender la repercusión de un debate electoral, comprender el sistema migratorio de las aves o el movimiento de las mareas, establecer modelos predictivos sobre cómo va crecer una ciudad, que inmuebles tienen más posibilidad de ser asaltados o de que manera se va a propagar una enfermedad.
La diversidad de información y la combinación con elementos como la localización, las relaciones entre datos o el componente temporal nos abre un abanico infinito de posibilidades de análisis mejorando la interpretación de los resultados y generando información que hubiera sido difícil de identificar de otra manera.
Para plasmar visualmente estos datos, actualmente existen muchas buenas aplicaciones y sistemas de información geográfica (SIG). Entre ellas cabe destacar la antes española y ahora americana startup CARTO, líder en el análisis y visualización de datos geolocalizados, que permite descubrir y predecir información clave de manera sencilla, intuitiva, potente y con un diseño elegante. Se centra en la universalización del análisis y en técnicas de visualización, permitiendo hacer de los mapas herramientas accionables para el día a día en los diferentes departamentos de cada empresa. Actualmente CARTO cuenta con más de 200.000 usuarios y 1.500 clientes entre los que destacan importantes empresas como AXA, BBVA, Google, Ayuntamiento de Nueva York, Twitter, IBM o Nasa.
